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Antes de nada pongámonos en antecedentes. La primera generación de los Mini – denominada R50 - dió paso a los R56, con sus respectivas versiones Clubman, John Cooper Works y Convertible. Dejando fuera de la ecuación a los Countryman, los R56 han sido considerados la segunda generación debido a su enteramente nueva selección de propulsores y un aspecto remozado. Es hora de un lavado de cara para esta segunda generación, que como ya os hemos anticipado viene acompañado de una gama de motorizaciones bastante actualizada y con consumos revisados a la baja.
Los chicos de Motoring File han logrado filtrar imágenes del lavado de cara de los nuevos Mini Cooper, John Cooper Works y Convertible. Creemos que el aspecto de los Clubman tendrá una correlación perfecta con el de los Cooper. La imagen que preside el artículo es la nueva cara de los Cooper, pocos cambios centrados en unas nuevas entradas de aire para los paragolpes delanteros. Los cromados son más abundantes y habrá opciones de personalización más variadas, pero básicamente lo que estáis viendo es la principal novedad. Un aspecto más deportivo, pero también elegante.
Las dos imágenes sobre estas líneas muestran cómo será el nuevo Mini Convertible. Apenas ningún cambio delante salvo mayor profusión de cromados, en la zaga casi tenemos que sacar la lupa para advertir unos antiniebla algo más anchos. También tenemos alguna imagen del lavado de cara de los John Cooper Works, donde no destacamos más que un frontal remozado al estilo de los Cooper. Todos los modelos con lavado de cara comparten unos pilotos traseros con una estructura interna más marcada, que los hace más vistosos.
Dejando a un lado cambios estéticos poco apreciables, tendremos nuevos colores para la carrocería, nuevos tapizados interiores y la ya mencionada nueva gama de motores, entre los que se cuentan los nuevos 1.6 turbodiésel de 112 CV y origen PSA, o el aumentado 1.6 THP de desarrollo PSA-BMW que además de tecnología Valvetronic ahora entrega 184 CV. Los precios permanecerán en la línea actual. En definitiva, un lavado de cara ligero y conservador para un coche que a toda costa quiere mantener una popularidad y estatus icónico.
Vía: MotoringFile
